El estado australiano ha multado a la compañía Apple
porque la publicidad que hizo sobre el IPad no se ajusta con la realidad. La
compañía ha tenido que pagar una multa de 2.25 millones de dólares
australianos, lo que equivale a 1.8 millones de euros.
Lo que ocurre es que las redes australianas no funcionan igual que las estadounidenses y por ello, en Australia, los nuevos IPad no pueden acceder a esa velocidad. Según la sentencia, la compañía Apple sabia este problema, y aun sabiéndolo, decidió anunciar que funcionaria.
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